Los gallos de combate también son propensos a las enfermedades, así como a los parásitos, como los piojos. Si algún animal está infectado, esto podría traer repercusiones en todo el gallinero. Por esta razón, es importante mantener el entorno limpio, y hacer un chequeo continuo sobre su estado de salud..
Una de las enfermedades que más afecta al gallo de pelea es el moquillo. En ocasiones esta enfermedad puede ser letal, pues debilita mucho al gallo de pelea, ocasionándole la muerte. Por esta razón, los suplementos vitamínicos, así como las vacunas y mantener la higiene en el gallinero son aspectos fundamentales para que el gallo de pelea se mantenga sano y fuerte.